Tras un año sin vigilancia privada en una parte de la ciudad que suele estar concurrida por familias, los habitantes reclaman que se agilicen los trámites para volver a contar con este servicio que consideran que se hace aún más necesario tras los referidos fuegos.
Maribel López, responsable de comunicación del colectivo vecinal, relata que en el momento en el que se desató el primer fuego, en el parque había numerosas familias y la situación supuso un peligro para las mismas.
López asegura que llevan demandando que vuelva la vigilancia privada desde marzo del año pasado, aunque desde el consistorio de la capital aún tienen que aprobar la partida presupuestaria destinada a ello en pleno, por lo que la situación podría alargarse en el tiempo.
Desde la asociación, consideran que, "las más de 800 personas que visitan el parque cada fin de semana, deberían poder estar allí con seguridad y tranquilidad,y que no se encuentren con nuevos actos vandálicos cada vez que vuelven a visitar la zona".
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